¡Cuán desobediente resulta ese niño tan grande para tan pocas entendederas! O quizás sea, precisamente, por ello; porque sus meninges no se han desarrollado aún lo suficiente como para abandonar esa manía de jugar colgando lacitos amarillos por los balcones, las ventanas, las farolas, las balaustradas, los árboles, etc., etc. a pesar de la prohibición explícita en tal sentido dictada por la Junta Electoral Central.
Parece seguro que el niño Joaquín Torra será castigado por ello. Con toda probabilidad permanecerá durante unos días de rodillas, con los brazos en cruz en el patio de la Generalitat, cara al Monseny, además de retirársele durante la hora del almuerzo, el suculento bocadillo de longaniza de Vic que guarda en el bolsillo interior de su chaqueta, justo detrás del lacito amarillo que luce en la solapa y que no deja indiferente a ninguno de los suyos.
Noticias Culturales Canarias, Criterios, Opiniones, Política
En principio, la Junta Electoral Central, consideró oportuno castigarle con una larga caminata desde la Generalitat de Cataluña hasta el monasterio de Monserrat cargado con un enorme lazo amarillo de considerable peso pero la idea fue posteriormente descartada por el enorme esfuerzo que supone semejante ascensión para un niño de tan pocas condiciones físicas como espirituales.
Por último, además de permanecer como estaba previsto unos días con los brazos en cruz, parece ser que finalmente, a instancias de la Ley de Régimen Electoral, se ha optado por aplicar una multa a sus familiares más cercanos pertenecientes al tan conocido partido PDeCat consistente en una cantidad meramente simbólica que se situaría entre los trescientos y tres mil euros.
Mientras tanto, los mossos d`esquadra se han visto obligados a tomar cartas en el asunto ante la desobediencia mostrada en un principio por el zangalote Torra.
zoilolobo@gmail.com
Arpeweb páginas web Tenerife
